Biodiversidad, Ornitología

El anillamiento de aves

Jornada de anillamiento por el Día de los Humedales

Anillamiento de aves

El pasado mes de febrero, concretamente el día 2 en el que se conmemora el Dia Internacional de los Humedales se programó un taller de anillamiento científico en el embalse de Arrocampo, organizado por el Parque Nacional de Monfragüe, el Ayuntamiento de Saucedilla y el gran equipo de anilladores (Hugo Sánchez, César Clemente, Sergio Mayordomo y Alicia Criado).

Tenía muchas ganas de escribir este artículo y que por falta de tiempo, que no de motivación, no había encontrado momento para ello. Y dicha motivación surge primero por mi creciente afición a la ornitología por un lado, y por el otro a la experiencia personal de poder asistir a un anillamiento.

Embase de Arrocampo
Embase de Arrocampo

Ésta fue mi primera toma de contacto con el anillamiento y que desde luego no me decepcionó. Se desarrolló la actividad con una pequeña ruta para escolares del municipio y abierta para todos los vecinos. A primerísima hora de la mañana el tiempo no acompañaba, primero por frío y segundo por una espesa niebla que impedía la observación de aves y que nos acompaño hasta bien entrada la tarde. Pero a pesar de las condiciones el día iba a traer varias sorpresas. Pero antes de seguir contando me gustaría explicar de qué se trata el anillamiento científico…

¿Qué es el anillamiento científico de aves?, ¿para qué sirve?.

Se trata de una metodología de estudio de las poblaciones de aves a través de un sistema internacional de marcaje mediante anillas. Las aves son marcadas con estas anillas que llevan un código único, como si llevaran su propio DNI, y con un distintivo de su procedencia. Para ello son capturadas en su medio natural y su anillamiento se realiza «in situ» para ser devueltas a su hogar con la menor interacción e impacto humano, evitando al máximo el estrés que pueda sufrir el animal.

Recogida de datos biométricos, en la foto se observa cómo se pesan.
Recogida de datos biométricos, en la foto se observa cómo se pesan.

Pero antes de soltar al ave se le realiza un examen muy riguroso que permitirá determinar la especie o subespecie, el sexo y la edad (que no siempre es fácil). Además se toman datos de su biometría, es decir, se miden las partes del ave como las plumas y las patas. También es analiza el estado físico de cada individuo observando el estado en el que se encuentran sus plumas, las mudas y la presencia o no de bolsas de grasa como reserva. Como veréis se obtienen una gran cantidad de datos con una amplísima utilidad para el estudio y su conservación

Posteriormente un ave que ha sido anillada puede ser identificada por un observador en otro lugar totalmente distinto. (Incluso a veces las aves son recapturadas en otras estaciones de anillamiento). El aporte de información es vital y el registro de observaciones en diferentes puntos del mundo ayudan a los expertos a describir la distribución de las aves, sus movimientos migratorios e incluso fenómenos provocados por la acción del hombre. Por poner un ejemplo, a día de hoy se estudian las modificaciones de los patrones migratorios de muchas aves provocadas por el cambio climático.

Pocas capturas pero grandes sorpresas

Aquel día todos disfrutamos de una jornada de anillamiento con un número de capturas bastante bajo, pero compensado por el gran atractivo de las especies. Los niños disfrutaron de lo lindo, yo me incluyo entre ellos, con especies tan llamativas como el martín pescador o el pájaro moscón. Además hubo emoción para todos, incluso para los experimentados anilladores que tuvieron la suerte de anillar una especie escasa en la región y que ha sido anillada en muy contadas ocasiones en Extremadura, la agachadiza chica. Un enorme aliciente para continuar practicando esta gran labor. ¡Desde aquí un saludo para ellos y gracias por invitarme!

A continuación algunas fotografías de la jornada:

Anillamiento de aves
El primer ave de la jornada, el pájaro moscón (Remix pendulinus)
Agachadiza grande
Agachadiza común (Gallinago gallinago). Lo más llamativo de este ave es sin duda su largo pico cuya punta es flexible y le permite cazar gusanos y otras presas en el fango.
La gran sorpresa de la jornada: Una agachadiza chica
La gran sorpresa de la jornada: La agachadiza chica (Lymnocryptes minimus).
Las aves se devuelven cuanto antes para evitar al máximo su estres y que el impacto sea mínimo-
Las aves se devuelven cuanto antes para evitar al máximo su estres y que el impacto sea mínimo.

 

Deja un comentario